¡No te hinches!

LA RETENCIÓN DE LÍQUIDOS ES EL ENEMIGO SILENCIOSO, EL PASAPORTE DIRECTO AL EXCESO DE VOLUMEN Y UNA DE LAS CAUSAS PRINCIPALES DE LA CELULITIS

Te doy varios datos con los que entenderás por qué se llama a la retención de líquidos el enemigo silencioso:

1. La celulitis edematosa -una de las más difíciles de tratar y que puede resultar dolorosa- está directamente causada por la retención de líquidos.

2. Ese abdomen abultado que no baja ni con ejercicio puede ser consecuencia de una retención de líquidos.

3. Esas bolsas bajo los ojos que nos hacen parecer agotadas en muchas ocasiones son causa de la retención de líquidos.

4. Puedes pesar hasta 2 o 3 kilos más solo por retener líquidos.

Un gran porcentaje de nuestro peso corresponde al contenido de agua del organismo, en personas sin sobrepeso se aproxima a un 60%  repartido entre órganos y tejidos.

El sistema linfático es el encargado de drenar todos los fluidos de los órganos hacia la sangre, pero a veces  los fluidos no se eliminan de forma adecuada, líquidos y toxinas se quedan en los tejidos, en los espacios entre las células y se produce la retención de líquidos.

En algunos casos aparece en la adolescencia y se convierte en una alteración crónica que hay que cuidar durante toda la vida.

Causas y consecuencias

Las principales causas de la retención de líquidos son tanto internas como externas: los cambios hormonales que se producen durante el embarazo, adolescencia o la menstruación, herencia genética, exceso de peso, problemas circulatorios, escasa ingesta de líquidos, proteínas y fibra, sedentarismo, ciertos medicamentos y enfermedades y también la pueden provocar el estrés y factores climáticos como el calor y la humedad.

La consecuencia de retener líquidos es una hinchazón en ciertas zonas del cuerpo, lo que se conoce como edema, nos sentimos incómodos y cansados. Las piernas son la parte del cuerpo que más acusa esta retención de líquidos, en los tobillos, la parte superior de la rodilla, y los muslos, debido a la postura. Pero también suele presentarse en el abdomen, pecho e incluso en los párpados y todo el rostro.

Peso vs retención de líquidos

La retención de líquidos no está directamente asociada a un exceso de grasa y de peso, hay muchas mujeres delgadas con problemas de retención de líquidos y de volumen.

El aumento de volumen que produce la retención de líquidos se puede confundir con un exceso de grasa. Para poder diferenciar estos dos componentes existe una técnica que se llama impedanciometría que calcula el porcentaje de masa grasa, de masa magra y de agua que tiene cada persona, esto lo mide gracias al cambio de velocidad que experimenta la corriente eléctrica al pasar por los diferentes tejidos.

Aunque los hombres tienen un porcentaje de agua en su organismo más elevado debido a que tienen más tejido muscular, y éste está constituido en gran medida por agua, son las mujeres las que tienen más problemas de retención de líquidos porque la presencia de dos hormonas femeninas -estrógenos y progesterona-  influyen en esta acumulación excesiva de agua. De hecho la retención de líquidos está muy relacionada con la aparición de un tipo de celulitis que se llama celulitis edematosa que sufren solo las mujeres.

Nutrición

La alimentación es lo primero que debemos vigilar ante un problema de retención de líquidos. La regla fundamental será reducir el consumo de sodio (sal) y aumentar el de potasio (frutas y verduras). El potasio es fundamental porque mantiene el equilibrio hídrico del organismo.

Recomendaciones nutricionales:

·         Beber: tomar dos litros de líquido al día. El té verde es un gran aliado porque actúa como diurético natural. También las infusiones de cola de caballo y de hinojo. Cuidado con algunas aguas minerales que son ricas en sodio.

·         Seguir una dieta baja en sal: hay que olvidarse de los embutidos, los quesos, las conservas, los frutos secos, las palomitas de maíz.

·         Tomar alimentos diuréticos, principalmente frutas y verduras como: piña, melón, sandía, perejil, nísperos, berenjena, calabacín, cebolla, pera, manzana, apio, jengibre o alcachofas.

·         Toma suficientes proteínas – carnes, pescado, quinoa y soja- porque cuando faltan en la dieta se reduce la producción de albúmina y se acumula líquido entre los tejidos.

·         Incluir complementos nutricionales que ayudan a drenar, los más recomendables son el potasio, el magnesio, el té verde, el Ginko Biloba, castaño de indias, las antocianidinas y otros como los extractos de corteza de pino o de pepitas de uva que también se utilizan mucho.

Tratamientos

En los centros médico- estéticos cuentan con tratamientos tanto mecánicos como manuales capaces de drenar y mejorar en gran medida el estancamiento de líquidos. Su aplicación produce una mejora de la circulación de retorno y microcirculación y de la acumulación de líquidos.

Los tratamientos con aparatología incluyen la presoterapia, ondas de choque, ondas electromagnéticas o vacumterapia.

En medicina estética se utiliza la técnica de mesoterapia mediante la cual se inyectan ciertos principios activos como alcachofa, hammamelis, arnica, belladona, echinacea, caléndula y meliloto que funcionan muy bien para eliminar el exceso de líquidos.

Respecto al drenaje linfático manual, el método Vodder es el más utilizado. Es una técnica manual que comienza con un movimiento de llamada o evacuación para conseguir la apertura de las vías linfáticas en los lugares donde se acumulan mayor número de ganglios linfáticos, se continúa con presiones lentas y rítmicas en sentido ascendente por todo el cuerpo para conducir la linfa hacia las principales vías linfáticas y facilitar allí su evacuación mediante un movimiento de captación o de reabsorción. Favorece el retorno venoso y linfático y promueve la relajación para una mejora general del bienestar y de los problemas de retención de líquidos y circulatorios.

¡NO TE HINCHES! ¡CUÍDATE!