El
experto Ata Pouramini identifica diez errores clásicos de las dietas para
adelgazar
Perder
peso es algo más que una intención, un afán o un deseo. Se ha convertido en una
verdadera obsesión del mundo occidental, un propósito sin fin no siempre movido
por cuestiones de salud. Las modas estéticas juegan en este sentido un papel
muy importante.
El
autor de “Tu eres tu Medicina” advierte que mantenerse en un peso óptimo no es
cuestión ponerse a dieta un mes sí y otro no, sino de llevar una vida saludable
en conjunto.
En este objetivo, añade el experto, no caben, por supuesto, ni las dietas
yo-yo, ni los regímenes autoimpuestos.
En
estas dietas no resulta difícil caer en errores que, cuando no resultan malos
para nuestra salud, nos mantienen en el mismo peso o incluso nos hace aumentar
de talla.
Procura no caer en ninguno de estos diez:
1. Necesitamos la
carne roja para suministrar proteínas a nuestro organismo. Falso. Algunos
alimentos que nos aportan escasas calorías son ricos en proteínas. Es el caso
de las espinacas, las setas o los espárragos. Si tu alimentación es completa,
abarcarás los aminoácidos esenciales para una buena nutrición.
2. Los productos
derivados de la soja no engordan y son más saludables. No es cierto. Los
brotes de la soja o la alubia entera son sanos, no el resto. Al contrario, si
abusamos de ellos pueden favorecer la aparición de problemas como
hipertiroidismo y desarreglos menstruales, ambos causantes del aumento de peso.
3. Los alimentos
integrales no suman calorías. Si lo hacen. Son hidratos de carbono, por lo
que engordan, pero son compuestos, mejores que los simples, los presentes en la
bollería industrial, por ejemplo. Quiere decirse que no provocan tantos picos
de insulina y tanta necesidad de comer para regular los niveles de azúcar en
sangre.
4. Los productos orgánicos
nos ayudan con la báscula. Falso en el caso de las frutas y verduras,
verdadero en el de la carne. En este último supuesto, si el ganado está
alimentado en pastos limpios y se alimenta de forma natural, su grasa
será buena. La producción masiva para suministrar carne a toda la
población no garantiza, de otro modo, que la grasa que produzca el animal sea
saludable. Ni siquiera en el caso de los pollos y pavos.
5. Lo Light te
ayudan a perder peso. No es cierto. Lo que hacen es substituir la grasa por
azúcares. A veces se engorda con su consumo, puesto que se ingieren más al
pensar que son inocuos.
6. Tomar fruta nos
adelgaza. Falso. Dependerá de cada fruta, pero, en general, esta
comida presenta altos niveles de azúcar natural, por lo que si, además, la
consumimos para cenar nos engorda más.
7. Las legumbres en
ensalada son un buen plato de dieta. Negativo. El consumo de legumbres
crudas produce intolerancias gástricas que van desde cólicos y diarreas hasta
el aumento de la ventosidad. Si se consumen con regularidad pueden producir
hinchazón de vientre.
8. El pan blanco no
engorda tanto como se cree. Muy al contrario, según estudios realizados en
la Universidad de Tufts, en Boston, las personas que toman pan blanco a diario
tienen tres veces más cantidad de grasa abdominal.
9. Crudos, mejor que
cocinados. En el caso del aceite es igual. No tiene ni más ni menos
calorías. El pescado y la carne no modifican sus propiedades. El que nos
engorde dependerá de los aliños, si se trata de salsas. En cuanto a las
verduras, si exceptuamos las verdes, mejor cocerlas para facilitar su
digestibilidad.
10. El aceite de coco,
prohibido. No, para nada. Es cierto que aporta calorías, pero no tanto como
se creía. Los triglicéridos de cadena media
presentes en su composición activan el metabolismo
produciendo un considerable gasto energético. Se ha demostrado su efectividad
en la lucha contra la obesidad y la grasa abdominal.
2 comentarios:
Muy interesante esta entrada!
Besos
Me encantan estas entradas que nos enseñan tanto. Apuntado todo cielo. Besitos.
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